"Creando un Corazón", La Experiencia.

"Yo, nunca pensé que podría estar escribiendo esto. Nunca pensé que podría estar viviendo una experiencia así. Nunca creí en nada parecido".

Miedo, desconocimiento, vergüenza, nervios, tristeza, desasosiego, culpa, envidia, inconformismo...alegría, millones de inquietudes, enormes ganas de vivir...

Es posible que con esas palabras pueda llegar a expresar como me sentía cuando llegué el sábado.

Creo que no puedo explicar con palabras lo vivido en dos días. 

Para mi todo empezó despacio, con el sol iluminando, absorbiendo información de cada detalle, de cada persona, sintiendo la conexión y con cada paso entrando en mi corazón lo que buscaba, lo que necesitaba. Y sí, estaba haciendo mi tambor, con cada detalle como lo sentía mi corazón. El centro, la cruz, la sujeción, el soporte, lo imprescindible...sentí la necesidad de hacerlo en el columpio, no sé porqué pero allí el sol me iluminó mientras yo formaba lo que para mi fue la parte central de tambor. Es así como finalizó el primer día, disfrutando, y pensando que ahí tenía mi aprendizaje. Había pensado, reflexionado, vivido y escuchado todo lo que me hacía sentir positivamente. 

Y así me levanté el domingo, observando cada belleza en la naturaleza y con mi primera reflexión del día "Hasta el sol puedes eclipsar cuando luces lo mejor de ti". Y esta frase vino a mi cabeza al ver una linda foto hecha por mi.

Empecé feliz el taller del domingo, con los ojos cerrados escuchando como Ooruk tocaba la guitarra y cantaba una de sus canciones. Por mi mente solo pasaban pensamientos lindos, y aún no sé cómo pero empecé sentir ganas de llorar, lágrimas que por mucho que las quise evitar terminaron saliendo por mis mejillas. No solo eran lágrimas, eran pesos que se encontraban en mi corazón y...que liberé. Increíble, me sentía como si estuviera sanando.

Un masaje, un masaje único en mi vida, la vibración entró en mi, en mi corazón, en mi cuerpo, en mi alma, y en mi mente...ahí sentí algo que en mi vida me había ocurrido con una velocidad de pensamientos mayor a la luz...reales e irreales, que me dejaron como si me hubieran destrozado todo el orden de mi mente, ¿y ahora que? No puedo dejarlo todo tirado, tengo que colocarlo....

Fue duro sentirme así, las lágrimas en mis ojos y mi interior revuelto. Pero, que lindo fue ir a buscar en mi interior y ver que la envidia había desaparecido, y también la culpa, y el inconformismo...y que sentía haber sanado una parte de mi y lo sábado me provoca sentirme plena.

Volví a mi vida después del taller con la sensación de que habían pasado muchos días dedicados a mi, y realmente solo fueron dos.

Y esto fue gracias a cada detalle que formó este taller, los encargados de impartirlo así como el lugar y las personas que están en él.

"Una vivencia increíblemente enriquecedora para mi interior, para lo mejor de mi.  Realmente he creado un corazón, que aún me encuentro ordenando pero en el que ha desaparecido lo que me impedía crecer, sentir, vivir".

Lugo 2020